Para nadie es un secreto que en la última década, la falsificación de productos ha cobrado un papel relevante y de gran afectación tanto a nivel industrial como comercial, llegado rápidamente a convertirse en un dolor de cabeza, que afecta principalmente, tanto a empresarios y dueños de negocio, como a consumidores y clientes, que cada día se han hecho más exigentes ante la incertidumbre de no saber si lo que están adquiriendo es o no, un producto de confianza.
Y es esta necesidad de seguridad y confianza, lo que representa una gran oportunidad para que las empresas, los comerciantes, y los mismos clientes, comiencen a tomar medidas de protección que les ayuden a combatir y erradicar definitivamente este mal que en la actualidad infortunadamente afecta a nuestra sociedad.
Algunas personas malintencionadas que solo buscan lucrarse ilegal y descaradamente, invaden el mercado con productos falsificados, sin darse cuenta que con acciones como estas, no solo afectan el buen nombre, la experiencia y confianza que las grandes empresas del país han construido con su trabajo durante años, sino que además, ponen en riesgo la integridad de los consumidores, dada la baja calidad de sus copias. Lo más preocupante es que esta actividad ilícita de la falsificación de productos, está cobrando mucha fuerza, no solo en el sector textil y de confección, sino también en el mercado de licores, bolsos, medicamentos, cosméticos y electrodomésticos, entre otros.
Como cliente ¿Cómo me podría afectar este tema?
La falsificación te puede afectar más de lo que crees, supón por un momento, que un día organizas una cena de reencuentro con familiares y amigos, y uno de los invitados lleva una botella de licor fino y costoso, con el cual realizan el brindis de apertura de esta velada. Lo que todos ignoran es que tu invitado, compró esta botella que a simple vista parece original, en un lugar en el que le ofrecieron un precio inmejorable; de esta manera, sin saberlo, todos han tomado quizás el trago más amargo de sus vidas, y pronto comienzan a experimentar los efectos del licor adulterado, y así, sin entender cómo, esta se ha convertido trágicamente, en una cena inolvidable.Así de fácil es como en un solo instante caes en el entorno de la falsificación de productos en la industria de los licores.
¿Qué medidas están implementado las empresas para contrarrestar estas desfavorables situaciones?
Buscando no solo cuidar la autenticidad de sus productos, su comercialización y obviamente a sus clientes, las empresas han comenzado a utilizar herramientas de seguridad en sus procesos de envasado y sellado, tales como la implementación de las etiquetas de seguridad, pero, ¿Cuál es la función de estas etiquetas de seguridad?
En esta ocasión te mostraremos 3 de las funciones más importantes:
1. Lucha contra la falsificación.
Erradicar la falsificación de sus productos, es un objetivo casi imposible de cumplir para muchas empresas, sin embargo, una función fundamental de este sistema de seguridad, es combatir al máximo las estrategias de falsificación desarrolladas por los criminales, minimizando todos los aspectos posibles que pueden hacer vulnerable a un producto. ¿Cómo se logra?
Una alternativa es el uso de sellos de seguridad, los cuales son diseñados con una tecnología que hace imposible su réplica. De esta manera, un producto original que cuente con un sello de seguridad, podrá ser fácilmente identificado por el comprador, lo que genera, sin lugar a dudas, un avance en seguridad y confianza tanto para la compañía que lo produce, como para los consumidores.
2. Evita la manipulación del producto.
No estamos sugiriendo que por el simple hecho de que un producto tenga una etiqueta de seguridad no esté expuesto a la manipulación, son muchos los mecanismos que utilizan los falsificadores para querer suplantar los productos originales, por ello, algunas etiquetas de seguridad ahora son creadas con una tecnología llamada Tamper evident o Void, que ayuda precisamente a saber cuando un un producto original fue manipulado.
Esta función le brinda a los consumidores la tranquilidad de saber que ese producto que van a adquirir o utilizar, no ha tenido ninguna alteración y que se encuentra en óptimas condiciones.
3. Protegen la imagen de la empresa
Si una empresa no implementa estrategias que le ayuden a cuidar la integridad de sus sistemas de seguridad, rápidamente podrá ser víctima de una afectación sobre su reputación, y su imagen quedará “manchada” ante los ojos de sus consumidores. Por ello, ya no es opcional manejar un factor diferenciador en sus empaques, pues de no hacerlo, los consumidores fácilmente podrán confundir sus productos con otro falsificado, y por lo tanto, vivir una mala experiencia que asocian directamente con la empresa, lo que claramente le conduce a no volver a adquirir ninguno de sus productos.
Además de ello, y no menos importante, es resaltar que los fabricantes o distribuidores que realizan este tipo de prácticas ilegales, solamente buscan un beneficio económico, sin jamás detenerse a pensar en lo perjudicial que resulta para la empresa que desarrolla los productos originales, y mucho menos en el daño que pueden ocasionar a los consumidores engañados.